¿Por qué se celebra el Día
del Maestro?
Figura insoslayable
del ámbito escolar y académico, también orientador y guía del ejercicio
creativo y el desarrollo de conocimientos, los maestros son una parte más que
importante de las instituciones educativas. Es por eso que cada 11 de
septiembre se celebra en la Argentina el Día del Maestro, en conmemoración al
fallecimiento de Domingo Faustino Sarmiento, allá por 1888.
Considerado el “padre
del aula”, y quien logró llegar a la Presidencia de la Nación entre 1868-1874,
Sarmiento fue el gran propagandista de la necesidad de una ley educativa argentina.
Muchas de sus ideas se recopilaron en su texto De la educación popular (1849).
Sin embargo, durante su mandato, no llegó a sancionar ninguna. Hubo que esperar
hasta el gobierno de Roca, cuando se aprobó la Ley N.° 1420 de educación
universal, obligatoria, gratuita y laica.
Si bien en 1943, la
Conferencia Interamericana de Educación celebró en Panamá la fecha a modo de
homenaje a los hombres y mujeres en el ejercicio de la docencia, es en 1945 que
se adoptó en la Argentina, por decreto del entonces presidente argentino,
Edelmiro Farrell. Algunos de los pasajes de la Resolución Oficial de aquella
Conferencia indican la importancia de la actividad docente, ya que se trata de
“una actividad fundamental de la escuela la educación de los sentimientos, por
cuyo motivo no debe olvidarse que entre ellos figura en primer plano la
gratitud y la devoción debidas al maestro de la escuela primaria (...); que su
abnegación y sacrificio guía los primeros pasos de nuestras generaciones y
orienta el porvenir espiritual y cultural de nuestros pueblos (...); que
ninguna fecha ha de ser más oportuna para celebrar el día del maestro que el 11
de septiembre, día que pasó a la inmortalidad, en el año 1888, el prócer
argentino Domingo Faustino Sarmiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario